domingo, 5 de julio de 2009

Editorial del Virus de la IV Año III No. 43 Julio 2009


La verdadera caridad

Hace algunos días, escuche a alguien decirle a otra persona “no lo regañes, acaso no tienes caridad”, y me surgieron de inmediato estas reflexiones que hoy comparto con ustedes:

¿Acaso Jesús no tuvo caridad cuando reprendió a los mercaderes en el templo? ¿Podríamos acaso decir que por ese hecho Jesús es falto de caridad?

Nos confundimos muy a menudo, mezclando sentimientos con virtudes, y aun más con espiritualidad.

Hechos circunstancias, tiempo-espacio, hacen que en ocasiones confundamos los verdaderos valores de las palabras.

Si así fuera, seriamos de preguntarnos si debemos de aceptar actitudes viruloides y mediocres que dañan estructuras solo por conservar “la caridad” de a quien conviene aplicarla en su momento.

Aunque es muy difícil humanamente explicarlo, no esta por demás analizar los siguientes términos:
  1. Caridad es un todo, virtud divina otorgada por dios a los hombres para su desarrollo y cuidado.
  2. Caridad no es solo esperar, sino también construir.
  3. Caridad es otorgar, dar, pero dignificar.
  4. Caridad es recibir para crecer.
  5. Caridad es confiar pero retribuir.
  6. Caridad es ser verdadero para no mentir.
  7. Caridad es arrostrar y no esconderse en ella para destruir.
  8. Caridad es buscarme a mí para encontrar a Dios en los demás.
  9. Caridad es apacentar pero no ser tonto.

Y tantas, tantas cosas mas que faltaría espacio para terminar.