“El Verdadero compromiso con Dios”
Muchas veces escuchamos en nuestra Obra la palabra “compromiso” y le damos diferentes connotaciones, muchas cercanas a lo que es esto y algunas otras muy desvariantes, creando realmente una confusión de esta simple palabra.
- Comprometerse con Dios es primero tener un encuentro personal con el resucitado.
- Aceptar ese encuentro en libertad como un llamado que El nos hace a formar seres integrales
- Estar atento a escuchar la voz para saber que quiere El de mí.
- Ser dóciles y seguir las enseñanzas que el mismo Jesús nos indica.
- Jamás anteponer las cosas personales para cumplir la misión que aceptamos en libertad.
- Proponer que la doctrina de Cristo es el amor vivo hacia el semejante, derramando en el todas las bondades que el mismo Cristo proponer para vivir en armonía
Con estos simples conceptos, quizás entendamos que el verdadero compromiso está en mí, de acuerdo a la actitud que decida tomar en mi apostolado
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